sali como todas las noches a despejarme y me daba igual el toque de queda nunca seguido las reglas, como decia mi hermano las reglas estan para saltarselas, y eso era algo que sabia hacer. caminando con la cabeza agachada y mirando al suelo escuche un susurro estraño que me hizo mirar al frente viendo a mi hermano dando de comer a su mascota

eso tendria que hacer yo hermanito

sonrey mientras me hacercava con paso lento mientras me metia las manos en mis bolsillos y me dirigia hacia astaroth y su mascota

aunque ya comio esta tarde

Caminaba por el bosque prohibido, llevaba la capucha cubriendo sus rubios cabellos, su rostro algo infantil y mirada dulce siempre despistaba a todos, quien pensaria que la chica dulce podia darte una patada en tus partes bajas de ser necesario?
Su túnica negra se camuflaba con la noche, a medida que avanzaba sus pasos realzaban entre el silencio, y los ruidos de ramas rotos no hicieron esperarse.
Su fiel varita en el bolsillo paso rápidamente a su mano, apunto al sitio donde se encontraba el ruido y se dirigio hacía allí, sin titubear, sin miedo a pesar de lo tenebroso del lugar.
Diviso a los Hellion cerca y bufo todo por nada-Que hacen ustedes aca Perros?

Caminaba por las oscuras y tenebrosas sombras del bosque, por un lugar donde la luz de la luna no se podia entrar por ningun lugar, noche fria y algo humeda, aburrida en la sala comun sin poder dormir me fui hacia el bosque con mi tunica color verde oscuro y la capucha echada a la cabeza, mientras caminaba entre los fondosos arboles escuche ruidos cercanos y unas voces conocidas, asi que me dispuse a acercarme hacia alla con la varita en mano por si algun monstruito del bosque prohibido se me abalanzaba, al llegar a sus posiciones escuchaba como Zoe la prefecta de casa llamaba perro a los que pude reconocer como los hermanos Hellion - ¿acaso quieres que ladren?

habrace a mi hermano y sonrey

hola hermano, si no podia dormir y sali a dar un paseo,ya me conoces

escuche unas voces femeninas detras nuestras y me gire mientras sacaba i barita de la tunica

valla valla si estan aqui las bellezas de slythering

decia sonriendo mientras mi mano apretava la varita con fuerza y mirava a mi hermano con una mirada implicadora que el solo entendia y solo le mirava asi cuando nos metiam en liosos en lios los dos juntos

¿perros? sonrey burlonamente eso es amor veo que nos quereis chicas

-Yo hago las preguntas aca perro pero bueno por esta vez pasa que no se repita, solo dejo la careta de niña buena para las demas casas idiotas-Dijo imitando batir sus pestañas como hacian las idiotas enamoradas.
Atrás suyo llego Dagna, la morocha inteligente que le agradaba y hasta hacian maldades juntas-Bueno esperaba que por lo menos me den la pata pero...no estan amaestrados-Torcio levemente su rostro, sonriendo de forma siniestra, su varita seguia apuntando a los chicos, no debian descuidarse, no por algo eran serpientes

Escuche hablar a todos ellos mientras me apoyaba en uno de los arboles y cruzaba mis brazos aun con la varita en mano y torciendo el rostro- cuando es aburro lo es sin mas, hay que animar el cotarro de los gryllos de vez en cuando - escuche lo que dijo Pit y no pude evitar reirme mientras negaba con la cabeza- oh si! loquitas estamos por vuestro amor - fuera o no verdad sobre el tema pues no sabia de zoe, no iba a decir nada mas sobre ese tema pues era algo para blandos, mire a Zoe mientras hablaba- pues para eso se enseñan, pero ¿para que serpientes cuando puedes usar pitufos? -refiriendome a los hufflepuff-

mire a mi hermano y di la espalda a las chicas bueno hermano sosiego y calma no queremos que nos hechen de nuevo, sobre todo porque aun no me e divertido me gire y mire a las chicas y me diriji a dagna asta que mi nariz casi toco la suya, muñeca de trapo, la observe fijamente puede ser aunque mejor de hielo aunque ya sabes hermano el hielo con el calor termina derritiendose, me diriji a la prefecta y le apunte con la varita en el pecho, y usted señorita prefecta si sacas la varita que sea para usarla de adorno todo el mundo tiene una la sonrei

-Grrr! disculpen señores pero yo de adorno mi varita no la tengo, aunque sus pelotas parecen estar de adorno-Suspiro soplando el flequillo rubio que caia sobre uno de sus ojoz azules, que en la noche brillaban más de la cuenta.
Sintío la varita de Piter sobre su pecho y levanto su barbilla, dejando caer la capucha, revelando en todo su explendor su cabello platinado-Es bueno que reconozcan que soy perfecta, prometo darles un hueso por ello-
Bajo su varita arqueando una ceja, sonriendo de lado y de un solo manotazo quito la varita de Piter de su pecho, quitandole importancia a su reto